Sello conmemorativo del V Congreso Internacional de Esperanto (ONB)
Son bien conocidas muchas de las actividades que se desarrollaron durante el V Congreso Internacional de Esperanto de 1909 en la sede central del palacio de Bellas Artes, así como en el paraninfo de la Universidad de Barcelona, donde se reunió el Lingva Komitato o los miembros de la UEA, o en el salón gótico de la Bolsa, donde se celebraron los Juegos Florales.
Sin embargo, al margen de reuniones de la Internacia Sciencia Asocio o de un sinfín asociaciones esperantistas especializadas («farmacéuticos, médicos, juristas, ferroviarios, marineros, vegetarianos, librepensadores, funcionarios públicos, taquígrafos»),(1) hubo diversos actos del Congreso abiertos al público y celebrados en distintos lugares de la ciudad.
Entre los actos abiertos del Congreso, hay que citar los servicios religiosos del domingo. En la misa católica celebrada en la Casa de la Caridad hubo sermón en esperanto del padre Richardson («Novan ordonon mi donos al vi: amu vin unu la aliajn»), que transmitió la bendición papal. Por su parte, el padre Rust predicó ante numerosos congresistas protestantes en una capilla evangélica.
Anuncio de La Vanguardia
Fuera de los centros neurálgicos del Congreso también hay que destacar la representación en el Teatro Romea de Mistero de Doloro, la adaptación al esperanto de Pujulà i Vallès de la obra de Adrià Gual.
En un artículo publicado en La Revuo, Camille Aymonier (1866-1951) dedica siete páginas (2) a glosar la representación. Aymonier explica que, tras «el imborrable recuerdo» de la representación de Ifigenia en Táuride de Goethe en el congreso de Dresde, «los catalanes, orgullosos de su país y de su renovada literatura, presentaron ante el público internacional la obra de un joven autor de Cataluña, profunda y decididamente nacional. La empresa fue audaz y estuvo coronada por el éxito. Todos los asistentes se sintieron agradecidos de poder penetrar de manera más profunda en el carácter original de este pueblo», y a continuación hace una encendida defensa del respeto del esperanto por las lenguas nacionales:
Os propongo y os pido que planteéis a los opositores del esperanto esta observación. Nuestra lengua, a la que se acusa de ser enemiga de las lenguas nacionales, a las cuales hará desaparecer, que eliminará los matices tan diversos de las producciones del espíritu humano infinitamente rico, que impedirá que se comprenda la diversidad de caracteres y temperamentos nacionales, nuestra lengua internacional ha dado a conocer, ha hecho comprender a personas de todas las partes del mundo, una obra profundamente nacional, y esa obra ha sido traducida con la inteligencia plena del corazón y el espíritu de un catalán, el señor Pujulà y Vallès, interpretada con la más sincera naturalidad y el más alegre fervor por actores catalanes, hermanos de los personajes a los que interpretan. Se puede traducir la obra al francés o al alemán, pueden representarla actores del Théâtre français o del Teatro Lessing, y desde luego el público francés o alemán nunca recibirá una impresión tan fuerte, tan justa como la que recibieron los congresistas en el Teatro Romea.
Camille Aymonier, «Mistero de doloro», La Revuo, 1909, p. 132
En el apartado musical destacan dos grandes conciertos. En el primero, del 5 de septiembre en el Teatro Romea, se interpretaron obras de compositores catalanes y franceses, así como fragmentos de Alcesto de Glück en la voz de Marie Brucker. En el segundo, celebrado en el Palacio de Bellas Artes el martes 7 de septiembre, se interpretaron clásicos catalanes como La nit de Sant Joan, Els tres tambors o Muntanyes regalades –con la traducción de las letras al esperanto impresas en el programa de mano– e himnos en esperanto como Akcepto, con música de Lambert y letra de Pujulà, o Al la fratoj, poema de Zamenhof musicado por Ònia Farga.
Sardana esperantista (ONB)
Las sardanas «y otras pintorescas» danzas catalanas estuvieron presentes en la «alegre excursión al monte Tibidabo, al que muchos subieron por senderos empinados llenos de encanto y otros en funicular».(3)
El miércoles 7 de septiembre, el parque de la Ciutadella, entonces conocido simplemente como «el Parque», fue escenario de un ejercicio de la Cruz Roja sobre la utilidad del esperanto. El presidente de Esperanto Ruĝa Kruco, general Priou, ya llevaba días reclutando «heridos» en el hotel, en las Ramblas o en el teatro («Puede que le corten un brazo o un pie o hasta puede que busquen una bala en su pecho», bromeaba).(4) Y efectivamente entre los «heridos» tendidos en el suelo bajo el sol del otoño se reconocía a Borel, Chaussegros, Aymonier y otros congresistas. El acto contó con la presencia de Zamenhof y posteriormente se depositó una medalla ante el busto del poeta Bonaventura Carles Aribau (1798-1862), defensor de una lengua universal.
La exhibición de la Cruz Roja (ONB)
También el deporte estuvo presente en el congreso de Barcelona, y si bien diarios como La Vanguardia o revistas en esperanto como La Suno Hispana, La Revuo o Lingvo Internacia mencionan la celebración de algunas actividades deportivas, los detalles se encuentran sobre todo en El Mundo Deportivo. En 1909, el que hoy es uno de los diarios deportivos más vendidos estaba en su tercer año de vida y era un semanario dedicado sobre todo al automovilismo y el ciclismo, en el que el fútbol todavía ocupaba un lugar secundario. La información deportiva relacionada con el Congreso está compilada en este documento de 20 páginas.
Cabecera de El Mundo Deportivo del 16 de septiembre de 1909
La organización del torneo de fútbol pasó por diversas vicisitudes, pero finalmente lo disputaron los teams júniors de Z, Olimpic, Badalona, Numancia, Catalonia y Salud. A última hora se añadieron Europa y Universitari.
Zamenhof decidió asistir al torneo de fútbol, mientras que al mismo tiempo «otros asistieron a una corrida de toros en las Arenas de Barcelona, un deporte ciertamente más bárbaro pero también más español que el futbol».(5) Después de que la banda de la Cruz Roja interpretara el himno Espero se inició el primer partido. El torneo hubo de seguir el miércoles y El Mundo Deportivo no se abstuvo de criticar la organización:
La fiesta en sí agradable; en la organización faltó experiencia, resultando en resumen poca cosa para los esperantistas extranjeros, los cuales conocen el sport más que nosotros y pueden formarse mal concepto del deporte en ésta, por lo que presenciaron.
El Mundo Deportivo, 9-9-1909, p. 4
Tras la suspensión del torneo el día 5, hay que esperar a la edición de EMD del 23 de septiembre para conocer el ganador del torneo. Bajo el titular «El concurso del Numancia F.C.», M. Mensa, el especialista en fútbol del periódico relata que
Uno de los individuos de la comisión del Concurso organizado en honor de los Esperantistas, D. Emilio Roig, me ha favorecido con atenta y cariñosa carta, relatándome lo ocurrido a propósito de dicho concurso.
El Mundo Deportivo, 23-9-1909, p. 4
Lo ocurrido no queda muy claro, pero sí parece claro que la final la disputaron Europa y Catalonia y que se impuso este último equipo con una «monumental» actuación de Colet.
El 10 de septiembre se celebró en el parque de la Ciutadella una carrera de motocicletas entre sólo dos participantes «que ocultan sus nombres bajo los seudónimos Sirep y Aparg [¿acaso Peris y Grapa?], ambos caballeros en motos de 3 1/2 HP, marca Griffon la del primero y Peugeot la del segundo».(6) La carrera se disputó a 10 vueltas (17,775 km) y se impuso Aparg en 22 minutos y 18 segundos.
A continuación, llegó el turno de los coches, o mejor dicho del coche:
Mientras se ponían los dorsales á los ciclistas, nuestro querido amigo Sr. Salazar, que asistía a la fiesta en representación de “La Hispano Suiza”, ofreció efectuar, fuera de programa, una vuelta de pista en cochecito Hispano 12HP, lo cual fue aceptado con agrado por el Jurado.
Salida de la Copa Esperanto, 10-9-1909 (ONB)
En una de las fotos que se conservan del congreso aparecen siete ciclistas (Quirante, Borrás, Alric, Barnola, Magdalena, Miró y Sum) a punto de tomar la salida en el parque de la Ciutadella. Se trata de la carrera que se celebró a las cuatro y media de la tarde del mismo día 10 de septiembre. Pero ¿qué clase de carrera era? Según aclaraba el reglamento, publicado por El Mundo Deportivo el 26 de agosto, se trataba de una carrera de 50 kilómetros con entrenadores en motocicleta, una modalidad que muchos años más tarde gozaría de gran aceptación en los velódromos y en la cual el mallorquín Guillermo Timoner fue seis veces campeón del mundo entre 1955 y 1965.
Guillermo Timoner con el maillot arco iris de campeón del mundo tras su entrenador Van Ingelgem
Los entrenadores no aparecen en la imagen de 1909 porque estaban situados más adelante.
A la señal de Arteman, parten todos de la meta en busca de sus entrenadores, colocados algunos metros más adelante, originándose a su encuentro alguna confusión por estar varios de ellos desprevenidos; no obstante, no se produce ningún incidente y después del viraje cada cual se pega á su respectivo entrenador.
El Mundo Deportivo, 16-9-1909, p. 1.
M. F. Creus, redactor de ciclismo de El Mundo Deportivo, ofrece un detallado relato de la carrera en la que se impuso «Magdalena, el pequeño crack de los ciclos Montpeó» quien demostró que era «de la madera de los campeones». José Magdalena se llevó la victoria «en buena lid, mereciendo por ello una entusiasta ovación y las sentidas frases de elogio que el Dr. Zamenhof le prodigó al hacerle entrega de la hermosa Copa, que constituía el premio de la carrera». Magdalena se llevó además 100 pesetas por su victoria (el diario, por ejemplo, costaba entonces 10 céntimos).
Al año siguiente, Magdalena se coronó campeón de España en ruta. En 1911 fue segundo en la primera edición de la Volta a Catalunya, una de las rondas por etapas con más solera del calendario internacional y en la cual se llevaría el triunfo en 1912.
José Magdalena en un cromo de Chocolate Amatller
Las noticias de una incipiente aviación también tenían cabida en las páginas de El Mundo Deportivo, y así, en su edición del día 16 de septiembre, el semanario se hacía eco de una conferencia organizada por la Asociación de Locomoción Aérea y en la que el gran protagonista era M. Archdeaçon (sic). Monsieur Archdeaçon no era otro que Ernest Archdeacon (1863-1950), pionero de la aviación y gran propagandista del esperanto que había venido a Barcelona con ocasión del congreso. En ese momento, Archdeacon era colaborador de La Revuo. Al año siguiente publicaría Pourquoi je suis devenu espérantiste y en 1932 entraría a formar parte del Lingva Komitato.
Luego ocupó el estrado M. Archdeaçon quien con gran claridad y demostrando el conocimiento que tiene del asunto, hizo una verdadera historia de la navegación aérea, empezando por los dirigibles y terminando por los aeroplanos, cuyos dos sistemas comparó, mostrándose partidario del más pesado que el aire, al cual, dijo, espera un glorioso porvenir.
El Mundo Deportivo, 16-9-1909, p. 3
Archdeacon no pudo quedarse al «lunch con el que se proponía obsequiar a los conferenciantes», porque tenía que asistir al que ofrecía el Ayuntamiento de Barcelona en honor a los congresistas.
Curiosamente, uno de los prototipos de Archdeacon guarda una notable similitud con la bicicleta Montpeó de José Magdalena.
Aéromotocyclette, prototipo de Ernest Archdeacon
(1) P. Corret: «La Kvina Kongreso», Lingvo Internacia, p. 432.
(2) C. Aymonier: «Mistero de doloro», La Revuo, p. 131-138.
(3) Carlo Bourlet: «Impresoj de kongresano», La Revuo, p. 125-126.
(4) Baronino de Ménil: «Ruĝa Kruco», La Revuo, p. 130.
(5) P. Corret: «La Kvina Kongreso», Lingvo Internacia, p. 394.
(6) M. F. Creus: «Match a motocicleta», El Mundo Deportivo, 16-9-1909, p. 1.
Actualizado: 2019-11-18